Los renos, sustento de civilizaciones, son los protagonistas de la evolución de los pueblos que habitan las zonas gélidas de nuestro planeta. Sin ellos los pueblos primitivos que se instalaron en el Circulo Polar Ártico no hubieran podido prosperar. Aparte del hambre probablemente hubieran perecido de frío.
Los renos hoy también son un atractivo para los turistas que visitan Laponia y proporcionan unos ingresos económicos muy interesantes que se añaden a los que se obtienen por la venta de su carne, piel, huesos y cornamenta.
Las granjas que ofrecen un servicio para los turistas son pocas, ya que educar a un reno para que arrastre un trineo es una labor que implica tener mucha paciencia y tiempo. Además hay que adecuar espacios para recibir a los turistas y que se sientan cómodos. Esto supone una inversión que no todas las granjas están dispuesta a realizar.
LA HISTORIA DE LOS RENOS
Los renos en Finlandia se empezaron a domesticar partiendo de los renos salvajes que habitaban toda Escandinavia. La cría de renos, destinada principalmente a la obtención de carne, empezó en los países nórdicos a finales de la Edad Media. En Finlandia esta actividad se expandió rápidamente desde el Sur-Oeste hacia Enontekiö y Inari en el siglo XVII, por el año 1600 y se propago hacia el Norte (Utsjoki) unos cien años más tarde.
La crianza de los renos, tal y como lo conocemos hoy empezó en el siglo XVIII.
LOS CICLOS DEL RENO
PRIMAVERA
El año del reno empieza con el nacimiento de los ternerillos. Mama reno da a luz después de nueve meses de gestación, cuando ya la nieve va fundiendo y aparecen zonas con vegetación. En el caso de que la primavera se retrase un poco, mama reno puede retrasar el acontecimiento hasta dos semanas. Una vez el ternerillo ha nacido, a mama reno le caen los cuernos.
VERANO
A principios del verano se marca a los ternerillos haciendo pequeños cortes en ambas orejas. Estos cortes son exactamente iguales a los que lleva su madre, pues más que difícil es saber quien es el padre.
Durante los meses de verano los renos viven libres en la periferia de las granjas, aunque pueden moverse unos diez kilómetros por día en general no se alejan de los limites de su granja.
Verano es una estación en la que el bosque esta a tope de comida. A finales de verano y principios de otoño el bosque se llena de setas y los renos pueden engordar de tal manera que si la temporada es buena les permite pasar el invierno con cierta comodidad.
OTOÑO
Esta es la estación donde los granjeros tienen más trabajo. Es aquí cuando los renos se separan y clasifican para contarlos y vacunarlos contra los parásitos. Tambien es el momento donde se sacrifican los más sanos.
Otoño es tiempo de reproducción, el apetito sexual florece y los machos se enfrentan para lograr su harén. Los renos no son agresivos, pero durante este periodo de su vida mejor no acercarse, no hay nada más peligroso que un macho astado rebosando testosterona.
INVIERNO
Llegado el invierno los renos vuelven a correr libres por el bosque, pero en muchos casos no se alejan mucho de las granjas. Los machos castrados empiezan a trabajar con los turistas. Finlandia es genial para esto y no hay ningún otro lugar en el Mundo donde poder disfrutar de un safari en compañía de estos fornidos y singulares animales.