Salla, el puente de la constitución en Laponia

A finales de Junio, mi peque y yo encontramos en viajacontuhijo.com este magnífico viaje ofrecido por Catai. Estudiamos la programación hasta aprendérnosla de memoria y decidimos reservar con la mayor ilusión este mágico viaje.

Durante meses fue el centro de nuestras conversaciones y esperábamos que el tiempo pasara muy deprisa para que por fin llegara el día 4 de Diciembre. Estábamos en contacto con otras familias monoparentales que con el paso de las semanas nos fuimos haciendo amigos mientras hacíamos planes. La noche del dia 3 de Diciembre, nos sorprendió la “huelga” de controladores y durante unas horas pensamos que nos quedaríamos en tierra, con la maleta llena de ilusiones. En todo momento nos sentimos respaldados por las continuas llamadas tranquilizadoras del personal de Catai que finalmente nos anuncio que nuestro vuelo seria uno de los primeros que despegaran del aeropuerto, después de 11 horas de retraso.

Con la alegría de haber despegado el vuelo fue muy rápido, y por fin llegamos al aeropuerto de Rovaniemi. Hacia frio pero era lo de menos. En algo más de 1 hora y media llegamos a nuestro destino, mientras disfrutábamos de un maravilloso paisaje nevado y comenzó la que ha sido la mayor aventura de nuestras vidas.

El primer día, visitamos una maravillosa granja de renos, desde la que hicimos una excursión disfrtando de unos paisajes increibles. El siguiente dia hicimos una excursion en motos de nieve, de la que mi hijo aun no ha dejado de hablar. En un lago completamente helado tratamos de pescar, sin demasiada fortuna pero maravillados por la experiencia. Aun nos quedaba la visita al poblado de Papa Noel, el momento que pasamos a su lado fue simplemente maravilloso y jamas lo olvidaremos.

Todo fue tan increible como lo habiamos imaginado durante meses, y logramos hacer nuevos amigos con los que compartiremos los recuerdos, espero que durante mucho tiempo.