en Laponia hace frío… pero yo me río!!!!

Aquí os dejo mi experiencia, uno de los mejores viajes de mi vida. Me lo he pasado en grande, he disfrutado y aunque pensé que este viaje sería más descansado que otros, la verdad es que no hemos parado ni un minuto. Un viaje de 11.

Antes del viaje (desde España)
Nosotros hemos hecho este viaje por nuestra cuenta. Reservamos la cabaña en Scandic Luosto (cuando decidas hacer el viaje, reserva el hotel al menos dos – tres meses antes, porque en temporada alta se agotan las cabañas pronto), el coche en el aeropuerto de Rovaniemi, los vuelos hasta Helsinki y de ahí a Rovaniemi, el hotel de Helsinki y las reservas de las excursiones a través de Julian. Haciendo cuentas, nos salía bastante mejor y con más días que con un viaje organizado.

1º Día
Después de varias horas de vuelo y de cambio de aviones, por fin llegábamos a Rovaniemi, el aeropuerto de PapaNoel 🙂 ya estábamos más cerca de todo lo que nos esperaba. 🙂
Una vez recogido nuestro equipaje (había llegado todo!!) fuimos a recoger las llaves del coche que habíamos reservado. Nos dice el chico, firmar aquí y aquí, esta es la matrícula, las llaves las teneis puestas en el coche porque esta puesta la calefacción para cuando subais. Nos quedamos los dos :O ¡¡alaaa!! y efectivamente, estaba super calentito y fuera a -25ºC. ¡¡¡Bienvenidos a Laponia!!!
Una hora y media después, estábamos en Luosto, buscando nuestra cabañita, y después de un susto (ha cambiado el nombre del hotel, ahora es Luostotunturi) ya estábamos en nuestra cabaña… Una pasada, su chimenea, su cocina, su baño, su sauna, sus 6 camas y su wifi!!!
Una vez dejamos todos los trastos fuimos a probar el reno, que ya había hambre. ¡¡Estaba buenísimo!! Fuimos a Hovi, está en frente de la recepción del Luostotunturi y la verdad que muy bien. Nada más terminar fuimos a recoger el equipo a Snowgames (mono, botas, calcetines…). Durante el resto de días, siempre íbamos con el mono, pero era gracioso ver a todo el mundo por ahí con el mono de snowgames jeje. Ahí conocimos a una pareja de Vitoria, y desde ese momento ya estuvimos todos los días juntos, ya esa misma noche hasta cenamos juntos, después de cenar a dar una vuelta por Luosto, que como es pequeñin, en nada te haces la vuelta, lo único que a -30ºC que estábamos ya… no te puedes parar mucho jejeje.

2º Día
Fuimos a dar una vuelta por el lago helado que hay cerca de las cabañas, increible ir andando encima del agua… al principio piensas ¡¡como se rompa!! jaja. Vimos un par de renos, uno de ellos blanquito, precioso, se pusieron a comer de los pinos congelados… ¡que valor! 😛 . Después de comer decidimos ir a ver a Papa Noel, todo muy ambientado, música, luces… te indican donde esta el Circulo Polar Ártico 🙂 y cuando ya estás congelado de estar fuera observando todo al milímetro, nos metimos a conocer a Papa Noel, estuvimos hablando con él, chapurrea cosas en castellano y al final… pues caímos y compramos la foto, no se ve todos los días a Papa Noel 🙂

Al volver a Luosto, fuimos a dar otra vuelta por la noche, siempre salíamos por si de casualidad veíamos la Aurora Boreal tan esperada. Al volver a la cabaña vimos en el termómetro -38ºC fue como si me entrase un frío de repente… bff… lo más bajo que vimos.

3º Día
Hoy nuestra primera excursión por la tarde con el trineo de Huskies 🙂 Pero hasta después de comer no era, así que cogimos el coche y fuimos a Sodankylä. Estuvimos dando una vuelta, ese día empezó nevando, vimos un cementerio todo nevado, la iglesia, paseamos un poco por las calles y al rato tomamos algo calentito para coger fuerzas. Aprovechamos en un supermercado para comprar cosas para comer/cenar luego en la cabaña.
Había llegado la hora, fuimos a Snowgames, nos explicaron como llevar la moto de nieve (ya llevaba la lección aprendida gracias al video de Julián 🙂 ) y nos fuimos con las motos de nieve a la granja de huskies, ¡¡la moto de nieve una pasada!! me encantó. Una vez en la granja te explican como llevar el trineo, como frenar etc… es muy fácil… Es un dulzura el trineo, impresionante, pensé que sería algo más brusco, pero nada. Los perros están deseando salir y correr… y cuando les frenas se te quedan mirando como diciendo .. ¡¡ehhh no me frenes!! ¡¡que quiero correr!! . Ahí yo no pude llevarlo, no nos avisaron para el cambio, pero aun así estar abajo, tan a ras de suelo y a la velocidad que van, es una maravilla, el trineo de huskies de lo mejorcito!!.

Una vez ya en Luosto, mientras íbamos caminando a la cabaña, mirábamos al cielo, ¡¡que es eso!! ¡¡has visto!! es … es … es una auroraaaa!!!!! correeeeeeeeee, fuimos a avisar a la pareja con la que habíamos estado estos días y corriendo llegamos al lago helado (se ve de lujo ahí) y disfrutamos de la aurora. Bff ya estaba en una nube… que dia tan grande!! motos de nieve, huskies y aurora!! Me fui a dormir ese día… ¡feliz!

4º Día
Hoy no había ninguna excursión contratada y pensamos (los cuatro) en alquilar moto de nieve por nuestra cuenta, no hay peligro, esta todo muy bien indicado y la verdad es una gozada. Alquilamos dos horas y disfrutamos de ir más rápido , carreteras todavía sin estrenar y de un sol que salió ese día y se dejaba ver entre los arboles blancos, ¡¡precioso!!
Luego fuimos a hacer rutas andando por ahí, hay muchas y muy bien indicadas. Al volver de la ruta comimos en la cabaña y nos fuimos al SPA del hotel. Nos fuimos a la cabaña de los de Vitoria a cenar. Esa noche fue la noche más grande del viaje … una Aurora tremenda, ese día, duro un montón y fue muy intensa. El único problema de que durase tanto fue que mis manos estaban ya congeladas, ¡¡un dolor de manos!! pero aún así una pasada… no me lo podía creer… ¡¡dos días seguidos!!!

5º Día
Hoy teníamos una excursión a las 10h de la mañana para ir a Pyha, fuimos hasta la montaña en moto de nieve, comimos reno allí y volvimos a Luosto, es una pasada el camino, además de ser mogollón de horas en moto de nieve 🙂 Al volver dimos otra vueltecilla por Luosto antes de hacer la excursión de raquetas, que caña poder andar por encima de la nieve sin hundirte!! 🙂

6º Día
Otro gran día, la excursión de Sampo, eran las 6 de la mañana, hacía muchísimo viento, y el problema allí es que la nieve, es polvo, y con ayuda del viento se hizo con la carretera, no podíamos sacar el coche.
Fuimos al hotel a preguntar si iba a pasar el quitanieves, nos dijeron que esta siempre dando vueltas, que no sabía cuando iría por las cabañas. También nos comentó que la carretera de Luosto a la principal estaba también en mal estado. No me lo podía creer… al final nos quedamos sin Sampo. Después del bajón, decidimos aprovechar el día y nos fuimos a Rovaniemi, estuvimos dando una vuelta por la ciudad, y sobre las 15h quedamos con Julián para tomar algo, me alegré mucho de conocerte, después de tanto mail … me apetecía darte las gracias en persona, por todo… ya sabes 🙂 Por la tarde fuimos al Artikum, que pasada… te quedas :O con algunos animales. Esa noche era la última noche en Luosto, así que fuimos a dar la última vuelta por la zona. Luego a preparar la maleta.

7º Día
Viernes, nos levantamos, desayunamos y vuelta al aeropuerto de Rovaniemi para ir a Helsinki a estar un par de días más, antes de volver a España.

COSAS VARIAS
Había leído que las baterías se descargaban, pues… tengo que decir… que ni por casualidad pensé que sería tan exagerado, el día que fuimos a dar la vuelta al lago helado, que vimos los renos, cambié la batería (llevaba varias) y no llegó a durar ni 15 minutos, como lo leéis… ¡¡ni 15 minutos!! me quedé flipando. También estábamos a temperaturas bastante extremas, esa semana estábamos de -30ºC a -38ºC.
Otra cosa que me pasó, es que el objetivo de la reflex iba lentísimo, me costaba girarlo y el filtro polarizador que llevaba no lo podía ni girar, se me quedó congelado. Las cámaras, tanto la reflex como la de video, le costaba muchísimo enfocar, parecía que les iba la vida. La que mejor funcionó fue la cámara compacta que llevabamos porque la guardabas más fácilmente en la parte interior del mono y no estaba tan en contacto con el frío.
Normalmente no hay temperaturas tan extremas, al menos por las experiencias que había leído, pero si cuando vais hace estas temperaturas, en el supermercado de Luosto venden unas bolsitas. Éstas al abrirlas se calientan, son para ponerlas en los bolsillos y así cuando tienes las manos a punto de romperse del frío, metes las manos y como aquello esta calentito se templan, dura unas 7 horas. A mi me vino genial.