Reserva de actividades en Helsinki
El día 14 volamos a Helsinki desde Madrid (Air France y Finnair), llegamos sobre las 14.00 y cogimos el autobus de finnair que en media hora te deja en el centro de la ciudad justo en la estación de trenes. Un par de calles mas arriba nos alojamos en el Hotel Sokos Presidentti que está muy bien sobre todo por las habitaciones amplias, la sauna y la piscina (ojo el agua está fresquita) y la sala de juegos para niños abierta durante todo el día. Tras dejar las maletas dimos un pequeño paseo por el parque Sibelius y el puerto, después al hotel, una sauna, bañito en la piscina y a cenar.
Al día siguiente aprovechamos para ver la catedral y pasear por la ciudad hasta la noche. Sobre las 22.00 horas cogimos un tren cama Helsinki-Rovaniemi. A los niños les encantó la experiencia, en un camarote de 3 literas con lavabo propio pudimos viajar los 4 (mi niño pequeño compartía cama conmigo), el vagon tenía baños bastante limpios y el viaje se hizo muy cómodo pese a durar 12 horas aprox. (Se pueden consultar horarios y tarifas en www.vr.fi)
Al llegar a Rovaniemi recogimos en la misma estación un coche de alquiler y nos dirigimos a las cabañas de Vaattunki a unos 25km al norte de Rovaniemi. Se trata de un complejo enclavado en un parque natural con cuatro cabañas con sauna propia para 4 personas y una especie de albergue con restaurante y saunas comunes frente al río.
Reserva de actividades en Helsinki
El sitio nos encantó la cabaña estaba a orillas del río y desde la puerta misma del complejo partían varias rutas a pie de distinta duración. Me sorprendió mi pequeño andando por las rutas disfrutando del paisaje. Los paseos se hacen muy cómodos por los tablones del suelo que veis en la foto. Además existen mini merenderos donde poder parar a descansar e incluso encender un pequeño fuego y asar unas salchichas…
Durante la semana que estuvimos allí alojados hicimos varias excursiones, canoas, visita a Santa Claus, visita a una granja de renos, visita a la granja de huskys (sí, en verano también se puede montar el trineo tirado por perros pero como no hay nieve vas montado en una especie de quad con remolque) , visita a los saltos de sky y alquiler de sauna con Hot-Pool ( piscina de agua al aire libre que se calienta con leña).
El último día antes del regreso nos alojamos en Rovaniemi en el Hotel Santa Claus, muy confortable pero con menos detalles para niños que el Sokos de Helsinki.
Sobra decir que todos disfrutamos de la experiencia, mi sobrina vino contando maravillas del viaje y yo tengo que confesar que cada día estoy mas enamorada de ese país, me fascinan, su cultura, educación y naturaleza, por eso siempre digo que, al contrario que muchos extranjeros que buscan sol, yo me jubilaré en Finlandia…