Ventana y nieve

Ventana y nieve (foto:KariYlitalo-VisitFinland)

Kilpisjärvi es ese pueblo que se ve en un mapa a la izquierda en lo más al Norte de Finlandia. Es el punto de partida para la ascensión al Halti (1.365 m) el pico más alto de Finlandia. Es donde se alcanzan las temperaturas más frías cuando miro el mapa del parte meteorológico. Es un pueblo de paso para muchos que se dirigen al Cabo Norte. Es el lugar donde se encuentra una de las colinas más famosas de toda Finlandia, si, esa colina llamada Saana que fue iluminada toda de azul el pasado día 6 de diciembre, centenario de la Independencia de Finlandia. Kilpisjärvi es el pueblo de paso cuando nos dirigimos  a ese punto donde de juntan las fronteras de tres países. Es allí donde se organiza una de las más importantes, sino la que más, competición de pesca sobre el hielo y, como no podía ser de otra manera, competiciones de motos de nieve y carreras de renos. Este pueblecillo que no parece gran cosa, tiene un alma grande y es el núcleo de una amplia zona que lo envuelve. Es el punto donde coinciden muchos granjeros y Sami de la zona.

Excursión en moto de nieve por los alrededores de Kilpisjärvi. Al fondo la colina Saana

Excursión en moto de nieve por los alrededores de Kilpisjärvi. Al fondo la colina Saana (foto:KariYlitalo-VisitFinland)

UN LAGO, UN PUEBLO Y UNA LEYENDA

Kilpisjärvi es el nombre del lago donde en su orilla  se encuentra el pueblo del mismo nombre. De hecho «järvi» significa lago.

Kilpisjärvi, el lago, es medianamente grande. Tiene unos 20 kilómetros de largo y en su mitad marca la frontera entre Finlandia y Suecia. Este lago se encuentra rodeado de los contrafuertes de lo que son los Alpes Escandinavos y por su elevada altura el lago se mantiene helado gran parte del año. Si partimos en coche o en bus desde Rovaniemi o incluso desde más al Sur hay un momento en que a pocos kilómetros de Kilpisjärvi se aprecia un cambio radical en el paisaje y casi de golpe se nos muestra menos monótono y es en este punto donde las colinas dejan de ser colinas y aparecen ya como montañas.

El lago Kilpisjärvi. Al fondo las montañas de Suecia

El lago Kilpisjärvi. Al fondo las montañas de Suecia (foto:KariYlitalo-VisitFinland)

Kilpisjärvi, el pueblo, es sinónimo de naturaleza salvaje, lagos helados, renos que pastan libres sin cercados y paisajes que no se relacionan con Finlandia. Un pueblo con menos de cien habitantes que atrae miles de personas cada año. No muy lejos del Océano Ártico y del punto donde se juntan las tres fronteras (Noruega, Suecia y Finlandia), Kilpisjärvi nos invita a ver rincones montañosos que nos hechizarán.

Paisajes de postal. Al-fondo se pueden ver las luces de Kilpisjärvi

Paisajes de postal. Al fondo se pueden ver las luces de Kilpisjärvi (foto:KariYlitalo-VisitFinland)

La leyenda de Kilpisjärvi nos cuenta que antaño este rincón de Finlandia estaba habitado por gigantes. Y fue aquí donde un gigante muy garrulo llamado Saana se enamoró de una bella doncella de nombre Malla. De tanto amor decidieron casarse y fue el sabio Paras quien les iba a casar, pero durante la ceremonia el celoso gigante Pältsä imploró a las malvadas brujas y de repente los vientos del Norte empezaron a soplar, y cortantes como navajas trajeron enormes masas de hielo, y montañas y tierra empezaron a congelarse. Fue entonces cuando Saana cogió en brazos a su amada Malla y juntos para siempre se congelaron en este lugar. Mientras se abrazaban Malla lloraba y sus lagrimas crearon el lago que hoy conocemos como Kilpisjärvi.

Detalle de la colina Saana en Kilpisjärvi

Detalle de la colina Saana en Kilpisjärvi (foto:KariYlitalo-VisitFinland)

Pasaron los años… y los siglos… hasta que la masa de hielo se derritió y los gigantes pudieron liberarse. Para ese entonces Saana se había convertido aun más tosco que antes. Entristecida, Malla se alejó de quien tanto la amaba y volvió al regazo de su madre y sus lagrimas formaron la cascada de Kitsi.

La cascada Kitsi (Kitsiputous) en verano

La cascada Kitsi (Kitsiputous) en verano (foto:EuropeanWaterfalls)

El recuerdo de esa boda aparece en Kilpisjärvi transformada en los colores de otoño, en las vertientes de las colinas y en los valles allí donde el viento empujo las ropas de quienes asistieron a la boda. Todavía hoy, miles de años después, se pueden ver a los gigantes más jóvenes en el fondo del lago transformados en los arboles que en él se encuentran sumergidos.

Detalle de Kilpisjärvi

Detalle de Kilpisjärvi (foto:JuhoKuva-VisitFinland)